martes, 15 de noviembre de 2011

El oratorio está triste




Hola padre Eduardo:
Escolapio bueno, sencillo, entrañable y gran amigo nuestro. Gracias por enseñarnos a rezar, a conocer a Jesús y a ser cada vez mejores.
Sabemos que estás en el cielo por eso cuídanos mucho que nosotros no te olvidaremos. Hasta siempre.